
El Johnnie Walker Black Label es un whisky escocés blended que combina más de 30 variedades de whiskies, creando un perfil de sabor con rica profundidad. Su cuidadosa mezcla ofrece un sabor vibrante y dinámico, con notas afrutadas y un elegante final ahumado que perdura en el paladar. Al disfrutarlo en un highball, este whisky revela una experiencia sensorial única, perfecta para acompañar cualquier ocasión.